Paula Vivero, es una de las primeras mujeres en asumir un cargo de liderazgo dentro de UMINE. En esta entrevista, nos cuenta cómo ha sido su experiencia laboral y las principales barreras que enfrentan hoy en día las mujeres para alcanzar roles de alta dirección.
“Llevo casi 15 años ligada a la formación online para diferentes empresas. Luego de varios años como Gerente de Operaciones, se me dio la oportunidad de seguir creciendo profesionalmente a cargo de la LMS y sus productos.
Mi gran salto fue cuando llegué a UMINE, aquí se me dio la oportunidad de liderar los equipos de Contenido y Operaciones. Una gran experiencia, que por momentos era agotadora, pero siempre con las ganas de seguir aportando al crecimiento de los colaboradores de las empresas que se forman con nosotros.
Creo que lo más desafiante de tener un cargo de liderazgo, en mi caso, tiene que ver con poder conciliar adecuadamente el trabajo y la familia”.
¿Cuáles consideras que son las principales barreras que enfrentan las mujeres para alcanzar puestos de liderazgo?
La baja representación de mujeres en los directorios es un problema persistente que refleja desigualdades de género en el ámbito laboral y corporativo. Esta situación limita el potencial de las empresas al privarlas de la diversidad de perspectivas y talentos que aportamos las mujeres.
Las barreras siguen siendo las mismas, las mujeres que trabajamos fuera de casa, no sólo tenemos la responsabilidad de nuestros equipos, si no que también la responsabilidad en el cuidado de los niños. Si bien esto se ha ido equiparando con el paso del tiempo, las mujeres tendemos a llevarnos la carga socio-emocional y pocas veces se comparte con el marido.
¿Qué deberían tener presente las mujeres que aspiran a altos cargos?
No hay una fórmula escrita para poder tener éxito e inspirar liderazgo. Pero pienso que lo más importante es creerse el cuento de que somos capaces de liderar a los mejores equipos, apoyarnos unas a otras.
Apoyémonos. Es importante que contemos con nosotras y podamos alentar a otras mujeres en el camino. Construir una comunidad de mujeres líderes puede ser una fuente invaluable de inspiración, motivación y colaboración.